Te enumeramos todo lo que tenes que tener en cuenta a la hora de contratar una inmobiliaria:
La primera razón para contratar una inmobiliaria es el ahorro de tiempo, ya que si te decides por una esta se encargará de recibir todas las visitas.
La inmobiliaria se hace cargo y es responsable del principal objetivo, vender o arrendar el inmueble.
En el caso de arrendar un apartamento o estar interesado en comprar una casa, la inmobiliaria se encargará del cumplimiento de los términos: pago de arriendo, administración y servicios públicos, firma del contrato o pago de la totalidad del valor del inmueble. En caso tal de devolución anticipada, también se encargará de llevar a cabo el proceso (término de duración o eliminación del contrato). Así mismo se apega al cumplimiento de la ley de arrendamientos, ley 820 de 2003 y la ley 1943 de 2018 de ventas de inmuebles.
Manejan convenios con entidades bancarias, lo que facilita el pago para ambas partes del acuerdo. A su vez cuentan con varios agentes inmobiliarios profesionales en ventas, con lo cual son varias personas encargadas de efectuar la venta o arrendamiento del inmueble.
Contratar una inmobiliaria no sólo te representará, sino también te dará la oportunidad de contar con asesoramiento y orientación en vista a un negocio viable con tu inmueble.
La inmobiliaria está al tanto del mercado, lo que da varias ventajas para efectuar la negociación con el inmueble como resultado del estudio de mercadeo que hace la entidad. Resultado que se obtiene de las características del mismo, como el promedio del sector, el estrato y las características con las que se cuenta. Debido a que el mercado cuenta con una gran oferta, al estar mediado por una entidad facilitará el proceso, por lo que no tardará tanto el proceso de tramitación ya que conocen las oportunidades efectivas en cada una de las zonas.
Al ser un especialista de bienes raíces, con un punto de atención fijo, generará mayor confianza a los aspirantes a comprar o arrendar tu propiedad.
Puede que el inmueble se ponga a disposición del interesado en menor tiempo que al hacerlo de forma individual, ya que está mejor posicionado en motores de búsqueda de inmuebles, gracias a la publicidad de los anuncios.
Durante el proceso legal y de tramitación, el agente inmobiliario se hace cargo de compartir los documentos necesarios y así mismo de supervisar el diligenciamiento y cumplimiento de las cláusulas del contrato por ambas partes.
La negociación, gracias al factor mediador efectuado por la inmobiliaria, es un trato seguro. La inversión que se hace en capital se verá recompensada con la gestión elaborada.
Por último las inmobiliarias le dan un valor agregado al inmueble gracias a la reputación, lo que genera mayor confianza en cada una de las partes involucradas.
Esperamos que estos consejos sean de utilidad a la hora de elegir una inmobiliaria, dejanos tu consultas y comentarios.